El dramaturgo, director, escritor y actor Albert Boadella Oncins ha recibido hoy el I Premi Sant Jordi de Societat Civil catalana en reconocimiento a su inquebrantable compromiso con la libertad y el pensamiento crítico y en homenaje a una extraordinaria trayectoria profesional al servicio de la Cultura en general y de las Artes Escénicas en particular.
Societat Civil Catalana ha instituido este galardón ante la constatación de que el sectarismo instaurado por el régimen nacionalista, que permea la mayoría de las instituciones civiles, culturales y políticas de Cataluña, las ha inhabilitado para poder reconocer la valía intelectual de cualquier ciudadano que no se exprese en catalán y acorde con el pensamiento único oficial. «El español es lengua oficial en Cataluña y excluir a quienes la utilizan para crear riqueza intelectual y cultural considerándoles, de manera injusta y torticera, malos catalanes o catalanes de segunda, lleva al ridículo, a la insignificancia y a la decadencia», ha subrayado la presidenta de SCC, Elda Mata Miró-Sans, en el acto de entrega del premio. SCC, asociación cívica y cultural, promueve, difunde y mantiene la cultura catalana como parte inseparable de la cultura española común.
En su intervención, ha definido a Albert Boadella como «excelso dramaturgo, director, escritor, actor, brillante argumentador y libre pensador que ha contribuido desde hace muchos años a la promoción de la cultura con C mayúscula». A sus incontables méritos profesionales «hay que añadir que es el máximo exponente de una cultura libre al servicio de la verdad, la razón, la justicia y la dignidad de todos los ciudadanos frente a los abusos derivados de cualquier tipo de fanatismo».
Ha elogiado Elda Mata el compromiso firme de Albert Boadella «con la defensa de los derechos y las libertades». Una «honestidad abrumadora, derivada del respeto hacia uno mismo» que lo convierte en «un referente moral de nuestra época», pero que, al mismo tiempo «le ha complicado enormemente la vida, la profesional y la personal». Ha denunciado, en este sentido, «el señalamiento, vandalismo, ostracismo y sufrimiento» causado al dramaturgo en las últimas décadas.
Elda Mata ha recordado que durante años «Boadella fue admirado en la tierra que lo vio nacer, donde se le consideraba un iconoclasta irreverente, un referente de la oposición intelectual al régimen franquista». Hasta que tropezó con el régimen pujolista y arreciaron los problemas: «Problemas que lo acabarían convirtiendo, probablemente a su pesar, en un símbolo de la resistencia civil». Su repudio al pujolismo plasmado en la icónica Ubú president, lo convierte en bestia negra del régimen nacionalista que todavía hoy nos gobierna.
Sin embargo, pese a este señalamiento y a las coacciones «a lo largo de cuatro décadas, y especialmente en los peores momentos, Boadella ha provocado la carcajada reconfortante, devolviendo al nacionalismo xenófobo y excluyente una mirada hiperrealista, bochornosa y vergonzante de su patética naturaleza».
La presidenta de SCC ha señalado que «en esta Cataluña donde se castiga la discrepancia política y social, la sociedad civil debe seguir el ejemplo de Albert Boadella y alzar la voz para revertir la situación».
Los Premios Sant Jordi de Societat Civil Catalana representan el compromiso de la asociación con la cultura, la libertad, el entendimiento y la concordia. «Los valores que simbolizan el libro y la rosa nos convocan a todos en torno a una jornada alegre y festiva, por lo que insistimos en reivindicar que la Diada de Cataluña pase a celebrarse el 23 de abril, ya que el 11 de septiembre ni es una celebración ni representa a todos los catalanes», ha concluido Elda Mata.
Trayectoria del premiado
Albert Boadella (1943) es una de las máximas figuras del teatro español. Su obra -satírica, desmitificadora, provocadora e inclemente con los abusos de poder- refleja su obsesión por la razón y la verdad frente a los dogmatismos. En 1977 fue detenido y condenado por injurias a la autoridad militar por la obra La torna. Escapó del Hospital Clínico de Barcelona en 1978 y se exilió en Francia. A su regreso a Cataluña fue nuevamente encarcelado en la Modelo hasta julio de 1979.
Director, desde 1962 hasta 2012, de la compañía teatral Els Joglars, que él mismo fundó, fue director artístico de los Teatros del Canal, de Madrid, entre 2009 y 2016.
Autor de los libros El rapto de Talía y Memorias de un bufón, con su ensayo de memorias Adiós, Cataluña gana el Premio Espasa de Ensayo en 2017. En Joven, no me cabree, obra recientemente publicada, se rebela contra los nuevos paradigmas de la corrección política.
Tiene el Premio Mayte de Teatro y el Premio La Barraca a las Artes Escénicas, concedido por la Universidad Internacional Menéndez Pelayo.